Bajo el lema "En la playa, las apariencias engañan" y "En la playa, pon todos los sentidos", la Generalitat de Catalunya ha iniciado una campaña a través de la Dirección General de Protección Civil para sensibilizar a la población sobre los riesgos de las playas e insistir en que es necesario observar unas medidas de autoprotección mínimas.
Con ella se pretende llamar la atención sobre el significado del color de las banderas
(verde: baño libre; amarillo: precaución; rojo: baño prohibido) y recordar el teléfono 112 como número único de emergencias, gratuito.
El servicio de vigilancia señaliza las zonas de baño de acuerdo con la clasificación establecida, y cambian de bandera en caso que la meteorología, el estado de la mar o otras condiciones así lo aconsejen. Así pues, en caso de bandera roja se prohíbe el baño y las actividades lúdicas en el agua, como el alquiler de motos de agua, patines, etc.
Las personas que se bañen sin hacer caso de esta prohibición lo hacen bajo su responsabilidad y pueden ser obligadas a salir del agua por su seguridad. Además, se considera una infracción de carácter muy grave y puede suponer una sanción económica correspondiente por parte de la autoridad municipal.
Así pues, antes de meterse al agua siempre hay que consultar el estado de la bandera que los socorristas y autoridades locales utilizan para indicar si el agua es apta para el baño.
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